EL otro día fuí a cortarme el pelo.Cuando me encontre con una amiga, me dijó que parecía una rata que siempre me cortaban el pelo "a lo rata",que por qué no cambiaba de peluquería.Y yo le dije:¡Estás loca!¿Cómo voy a cambiar de peluquería si aquí ya me conocen?.Me miró con desprecio y me dijó:¡Estás loco!.
Los hombres,aunque nos corten el pelo a tazón,seguímos siempre en la misma peluquería.Tiene que morirse el peluquero para que probemos otra.Las mujeres,sin embargo,aunque les guste una,se pasan la vida cambiando de peluquería.Cambian por cambiar:se cortan el pelo y luego se ponen extensiones.¿Entonces para qué se lo cortan?Luego dicen que los infieles somos nosotros.
El hombre es mucho más fiel.Nosotros no vamos a un bar vamos "al bar".Porque nos encanta eso de decir "jefe" y que nos conozcan.Y que nos tengan lista la cerveza antes de llegar a la barra.Ysiempre bebemos la misma cerveza,salvo que no haya;entonces bebemos cualquier cosa.Un hombre en un bar que no es "su bar" se siente más perdido que el Dalai Lama en la Ciudad de México.
También somos fieles al mismo tipo de mujer.Y cuando cambiamos de novia sentimos un deja vu.Las mujeres no,ellas cuando cambian,cambian,y si no¿en que se parecen Cuahtémoc Blanco y el DR Krasovsky? En nada.Solo en tener en sus brazos a Galilea Montijo.
Los hombres somos fieles y sencillos:si a ti te gusta la ropa interior negra,siempre te van a gustar las mujeres con ropa interior negra.
No como ellas,que un día te quiere ver con boxers negros,otro día con tanga de elefantito;y un día van y te compran unos negros de licra,que,cuando te miras en el espejo pareces ciclista con anorexía.
El hombre es fiel,incluso, a la postura sexual.Si te va bien una cosa¡para qué cambiarla?El que es de postura de perrito es del perrito.Y aunque pruebe otras posturas,al final,para quedarse a gusto,tiene que acabar con el perrito.Ellas, como siempre quieren incorporar cambios,un día te empiezan a pellizcar los pezones porque lo han leído en una revista de mujeres.¿No crorazón no!¡Lo que queremos toda la vida, es una, buena felación como Dios manda y luego el perrito.Cambiarle a un hombre estas cosas es como decirle a Paris Hilton que estudie.
Y es que los hombres tenemos la manía de ser fieles a cosas absurdas.Mi padre,por ejemplo,no hace nada en casa,pero,eso sí,las parilladas los domingos las hace él.Los padre tienen que hacer las parrilladas los domingos y si no, se enojan.
También está el fútbol.Nosotros no cambiamos de equipo ni aunque baje a segunda.Los colores son los colores...Sin embargo, mi novia dice:Yo voy con los que pierden,que me dan pena.Y se queda tan ancha.Pero tú,cuando tu equipo pierde,te quedas tan jodido que te acuestas sin cenar.A ella le da igual,¡¿Cómo se pueden poner el pantalón rojo con la camiseta verde...y el arbitro no dice nada?!
Es verdad que el hombre no es muy fiel a la mujer,pero es superfiel a lo que una mujer le dice.Si ella le comenta "te queda muy bien el azul",oye,hasta tu casa la pintas de azul.Y,si no,¿quién le dijó a Carstens "que bonito cuerpo tienes,Paquita la del Barrio"?.
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